MILANO

Sábado 14 de Noviembre, 5:30am, tren FrecciaBianca rumbo a MILANO

05.52 - 08.25 

Here I go

Mapa oficial para no perdernos

Como fue -y siguió siendo- imposible organizar viajes con más gente (parece mentira) porque todo el mundo tiene algo mejor que hacer y alguna excusa por la que no ir, yo preferí no perder oportunidades y aprovechar para ver la mayor parte de las ciudades que quería visitar.

Después del viaje en tren que fueron unas 3 horas, llegué a Milán, y me encontré con una estación de tren enorme, que tiene la misma seguridad que un aeropuerto. Enorme e impresionante decoración.

Esta foto no le hace justicia

Me fui a la estación de metro y además de sorprenderme porque cada estación es un centro comercial subterráneo y casi confundirme de metro, cogí el correcto hacia el centro de Milán.

Pongámonos en situación: sales de la estación de metro subiendo unas escaleras y te encuentras de frente con esto:

La foto es un poco rara, parece que la torre se está derritiendo, lo sé. Culpa del modo panorámico del móvil.

Me quedé impresionada, la verdad no esperaba salir y aterrizar en la Piazza del Duomo, ¡pero mucho mejor para comenzar la ruta!

Tenía todo bastante planeado, la catedral había abierto sus puertas a las 8am y ya eran las 9am. La plaza estaba bastante vacía, con mucha vigilancia policial y militar, pero vacía de turistas. (La foto es de dos o tres horas más tarde), así que pude comprar mi entrada (2€, incluye catedral y museo) y entrar a la catedral sin esperar cola.

-> Si queréis ir a verla, id temprano, a las 10am ya había una cola en la que debías esperar como mínimo 50 minutos para la visita. 

Esto es un selfi. Os saludo desde las sombras.

La catedral por dentro es impresionante, probablemente la más bonita de las que he visto hasta el momento en Italia y de estilo gótico de manual. 

Como estaba sola y me niego a comprar un palo de selfis, se me ocurrió la genial idea (que me parecía lo más normal del mundo) de pedirle a alguien que me sacara una foto. En la catedral a esas horas sólo había un grupo de turistas chinos así que me acerqué a probar suerte: 

-Excuse me, do you speak english?
-...
-No english?
-No. Se gira y se pone a hablar con un señor.

Pensé "mala suerte" y seguí sacando fotos. Pero lo gracioso es cuando 5 minutos más tarde me viene a hablar la misma señora en perfecto inglés y me pregunta si era para sacarme una foto.
En fin, mi cara lo dice todo.

LA FOTO.

Estatua en el centro de la plaza, Vittorio Emanuele II

Galería Vittorio Emanuele II  - Esta es la parada que todo el mundo te sugiere hacer, para ir de compras.

Yo no entiendo por qué, si ahí sólo compran jeques árabes y gente con cuentas en Suiza.

Pero bueno, si queréis (como la mayoría de turistas que vi) sacaros la foto delante de la tienda de Prada o Gucci, adelante. A mi me pareció entre gracioso y cutre, pero bueno.

De las pocas tiendas que se salvan en la galería (y porque está por la parte exterior) es H&M, así que aproveché que tenía infinitas plantas para probarme todas las colecciones. Es mentira, no todas. 

Pero ya tengo qué ponerme en las cenas de estas navidades. Yujú!

"Oh chiiiica esto me lo compré en las galeríaas de la Piazza del Duomo en Milano, ossseea"  no sentiría la necesidad de escribir tal retrasadez si no viera estas situaciones tan a menudo. Postureo todo.

(También había unos jerseys navideños monísimos)

Os recomiendo la Galería por su techo, como siempre. Mirad hacia arriba.

Psssss, hay un McDonalds, para que podáis presumir de haber comido también en el prestigioso sitio - de nada.

Yo me llevé la comida de casa, una especie de durum vegetariano que fue la peor opción del día porque me dejó un dolor de garganta (sí, garganta) gracias a la cebolla cruda que me duró toda la visita.Y esto queridos míos es lo que pasa cuando haces la comida el día antes a correr, y encima queriendo ser original. Un sandwich era mejor idea.

Estatua de Leonardo Da Vinci

No sé qué es, me lo encontré paseando por la ciudad.

Castello Sforzesco

Visita obligatoria al menos a sus alrededores. 

Os van a "atacar" para venderos pulseritas de colores. 

Aquí yo intentaba comer y salí volando al primer puesto de comida que vi a por un chupa-chups. 

Maldita cebolla.

Vista panorámica un poco rara 

Y cómo no, después de haber hecho todas las visitas turísticas que tenía previstas (no todas, pero problemas logísticos forzaron escoger las que más me interesaban), me fui de paseo. Y me encontré un GROM <3 . 

Con helado de Caramelo a la sal, era mi día de suerte.

La mujer era tan maja que me puso doble de helado en el cono pequeño, de ahí la montaña esa. 

felicidad

------------------------------------------------------------------------------------------------------

Datos de interés: La ida en tren la reservé a una semana del viaje y conseguí la tarifa económica, por 19€. Si hubiera reservado antes habría conseguido más rebaja, con la "supereconomica".

La vuelta a Mestre la tenía reservada con Flixbus y para llegar a la estación de autobuses tuve que coger otro metro (1,50€ por trayecto). El autobús me había costado 6€ (ESN tiene descuentos con la compañía) a través de la app, así que el transporte en total ida y vuelta fueron unos 28€